Hola, querida Bly: ¿Dónde estoy? 1ª Soy alta y altiva, de rojo me vestía... mas fui mora y después cristiana. Si me quieres encontrar, lo podrás hacer viéndome bailar al son de castañuelas y mirando al río y a la ciudad de azahar... Creo que estas pistas son suficientes para poder llegar hasta mí... 2ª En mí, queridos amigos, se resumen a las mil maravillas muchos siglos de historia sobre mi propia fisonomía. La confluencia de mis diferentes estilos arquitectónicos que me caracterizan se hallan en el reflejo de las culturas que habitaron mi ciudad. Por lo tanto, el resultado, ecléctico y singular, fascina a cualquier viajero. Ah, estoy en una ciudad que da nombre a un baile y canto típicos que nacieron en mi urbe, ciudad que llegó a ver pasar ríos de oro en los barcos que venían del otro lado del mundo (de más allá del Mar Tenebroso)... Hasta aquí ya han llegado: Juan Ángel, Mayen y Luis María. El próximo, viator querido, espero que seas tú... 3ª Verás, mi primer tramo es de estilo almohade. Los arquitectos Ibn Basso y Alí de Gomara fueron mis artífices. Y fui construida para la gran mezquita de la ciudad. Sin embargo, un terremoto en 1356 provocó la caída de las cuatro esferas de bronce que me coronaban... Son buenas pistas, ¿verdad? Entonces, ven, como ya lo han hecho también, sumándose a los que aquí ya estaban, Alegría y René... Espero que no te pierdas por las calles de mi ciudad con tanto flamenco y rebujito... 4ª Continúo describiéndote mi fisonomía: verás, el cuerpo de mis campanas es de estilo renacentista, y fue diseñado por Hernán Ruiz en el siglo XVI. En mi cúspide, a 104 metros de altura, podrás adivinar una veleta muy especial: el Giraldillo, otro símbolo de la ciudad donde habito... Es una clara y buena pista para que vengas a visitarme... Por cierto, ya están aquí también Santi, Graciela Marta, Ana Lucía y Fernando, que se suman a los que ya habían llegado hasta mis puertas... Ahora, amigo viator, te espero a ti... 5ª Recientemente se ha descubierto que yo no mostraba el ladrillo tal como lo vemos hoy en día, sino que estaba revestida de color rojo. Al menos se sabe que así era en la época almohade y renacentista. Pinturas y grabados de hace siglos atestiguan mi carácter polícromo. En el famoso cuadro Santas Justa y Rufina de Murillo lo podéis observar perfectamente... Ya no tienes excusa para venir a buscarnos y estar un ratito con nosotros... 6ª Verás, el perfil del mayor casco histórico de mi país tiene en mí a su absoluta protagonista... y no lo digo por presumir, ya que, incluso, las decenas de torres y espadañas diseminadas por el centro de él parecen saludarme respetuosamente, cosa que yo agradezco todos los días con el sonido alegre de mis campanas al viento de la ciudad del río Betis... Creo que está claro el lugar y también mi nombre, ¿verdad? Entonces, viator amado, ven con nosotros, pues cuantos más seamos, mejor y mucho más disfrutaremos de este momento histórico que te brindo...

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